Nunca supimos cómo, pero un día sus voces invadieron el blog. Intentamos sacarlas con todo: Delete, atrás, prt scn y el borrador de paint, echamos lavandina en la pantalla, Ctrl-Alt-Del, control X, y hasta llegamos a borrar el blog para descubrir al día siguiente que los ocupas habían logrado abrirlo de nuevo.

Con el tiempo, y tras sacrificios al dios del internet entre varias infrutiles estrategias más, nos dimos cuenta que no se irían. Decidimos entonces darles este espacio para que expresen sus rarezas… ¿Quién sabe? Tal vez así se cansen y se vayan.

septiembre 16, 2013

Letra para mis pobres acordes

¡Cómo me cuesta escribir! Que difícil se me hace expresar mis sentimientos a todo el mundo, ni hablar de  hacerlo en forma de canción. ¿Cómo será que hacía el gran Ricardo para sacar infinidad de discos y nunca dejar de lado la poesía y la belleza de sus canciones? Sin dudas, un groso! Sería muy soberbio de mi parte intentar seguir sus pasos.

Me acuerdo también del día en que se me ocurrió jugármela por el rock. Buscaba algo nuevo, algo innovador. Pero las ambiciones se fugaron cuando escuche “Ciudad mágica” de Tan Biónica. Eso sí que era rock progresivo, y del bueno. ¿Cómo superar eso? Mejor me dedico a otra cosa, es difícil competir con aquellos genios del siglo XXI, se las sabían todas.

Hablando de ciudad mágica, cada día más aburrida esta Buenos Aires. Es tan difícil inspirarse para componer cuando todo es tan perfecto y no hay errores. “Prohibido equivocarse”: bienvenido a la ciudad de los perfectos. Hasta Messi se hubiera sentido subnormal en esta ciudad.

Ese debe ser el problema, claro! Los tipos estos de Tan Biónica, Agapornis y todos los artistas de culto hoy en día, vivieron una ciudad que era un esperpento. A cada minuto se topaban con una injusticia, con algo novedoso, inspirador, cosas extraordinarias de las cuales emergían las canciones casi sin darse cuenta.
Que ganas de vivir esa época: Fiesta y cambalache, caos e inseguridad, pasión y violencia, y sobre todo las cosas, libertad.

Hoy somos robotitos del sistema. Tengo entendido que en los comienzos del siglo de la manzana y las redes sociales, ya había unos cuantos que se sentían aprisionados de la rutina, pero eran muchos los que aún se rebelaban.

Hoy no. Si alguno osa con cambiar algo de lo establecido, es despojado de todo de inmediato. Hoy somos más robots que nunca.

¡Wow! Creo que está saliendo una idea, se viene un nuevo tema?


¡¡Arjona inspirame!!!

1 comentario:

  1. Siento que este texto busca ser una provocación, a la cultura! pero definitivamente hay un posible tema nuevo en estas reflexiones, claro que no creo que la mejor inspiración en materias de temas trascendentes sea el Ricardo ese... con la alienación puede ser más indicado invocar a Tom York, pero hay muchos rebeldes de fines de siglo XX y principios del que sigue que pueden inspirar la lucha por la libertad

    ResponderEliminar